Rita Levi-Montalcini, una bióloga que dirigió una investigación clandestina, desafiando la persecución fascista y ganó un premio Nobel por ayudar a desvelar los misterios de la célula, ha muerto en su casa de Roma el pasado 30 de Diciembre. Tenía 103 años.
El alcalde de Roma, Gianni Alemanno, dijo que su muerte ha sido una gran pérdida «para toda la humanidad», y agregó que ella representaba «la conciencia cívica, la cultura y el espíritu de investigación de nuestro tiempo».
Llamada la «Señora de las células de Italia», fue un judia que sobrevivió la discriminación antisemita y la invasión nazi y se convirtió en una de las principales científicas de su país. Ella compartió el premio Nobel de Medicina en 1986 con el bioquímico americano Stanley Cohen por una investigación innovadora. En 2001 Italia la nombró senadora vitalicia.
Levi-Montalcini mantuvo una intensa agenda de trabajo hasta bien entrada la vejez. «A los 100, tengo una mente superior – gracias a la experiencia – que la que yo tenía a los 20 años», dijo en 2009.